Es muy importante llevarlo a clases de obediencia desde pequeño. Por naturaleza el perro es amistoso y mucha energía, dada la ocasión muy dispuesto a proteger la familia. Muchas personas piensan que las clases de obediencia son para perros que en los planes de sus amos serán eventualmente participantes en competencias, de conformación o de campo. No es así. Las clases son para todos los perros, sobre todo para aquellos que desempeñarán la muy difícil tarea de ser mascotas. Le ayudan mucho al perro y al amo a socializar con otros perros y personas, fundamentan la unión que después le hará más fácil convivir bajo el mismo techo. El perro de competencia siempre está socializando y su adiestramiento siendo reforzado. La mascota, si no la llevan a pasear y tomarse unas clases de vez en cuando, las experiencias de su vida se limitan a cuatro paredes y el espacio entre ellas. Después no se queje del perro.
Comprender y aprender, no mecanizar respuestas
El adiestramiento cognitivo emocional se desarrolló en sus inicios con perros de asistencia, cuando el conductismo de Skinner y le etología de Konrad Lorenz no podían dar soluciones a determinados problemas. El concepto de adiestramiento cognitivo emocional se desarrolla sobre dos pilares fundamentales: comprender en lugar de mecanizar respuestas (cognición) y una correcta gestión de las emociones del perro. El resultado es que desaparecen los premios como los entendemos, pues el mero hecho de comprender y aprender ya sen convierte en una motivación por sí mismos.
El perro gana autonomía, capacidad de decisión, es más resolutivo y ante un problema el perro piensa y opta por una u otra opción por sí mismo.-
www.instructor-doncan.tk = (Carlos 011-15-3557-9995)